Salsa verde casera
La salsa verde casera es una deliciosa adición a cualquier platillo mexicano. Perfecta para acompañar tacos, quesadillas, carnes y mucho más, esta salsa es fácil de preparar y ofrece un sabor fresco y picante que realza cualquier comida. A continuación, te comparto una receta de salsa verde casera que puedes hacer en pocos minutos y con ingredientes fáciles de conseguir.
Ingredientes
Para preparar esta salsa verde casera, necesitarás los siguientes ingredientes:
- Tomatillos: 500 gramos, pelados y lavados.
- Chiles serranos: 2 a 4 unidades, dependiendo de tu tolerancia al picante.
- Cilantro fresco: Un manojo pequeño.
- Cebolla: Media cebolla, picada en trozos grandes.
- Ajo: 2 dientes de ajo, pelados.
- Sal: Al gusto.
- Agua: Suficiente para hervir los tomatillos.
- Aceite de oliva: 1 cucharada (opcional).
Instrucciones
- Preparar los tomatillos: Coloca los tomatillos en una olla grande y cúbrelos con agua. Llévalos a hervir y cocina hasta que cambien de color y se ablanden, lo que tomará aproximadamente 10 minutos.
- Preparar los chiles: Mientras los tomatillos se cocinan, corta los chiles serranos por la mitad y retira las semillas si prefieres una salsa menos picante.
- Licuar los ingredientes: Una vez cocidos los tomatillos, colócalos en una licuadora junto con los chiles, la cebolla, el ajo y el cilantro. Agrega un poco del agua de cocción de los tomatillos para ayudar a la mezcla.
- Sazonar: Licúa los ingredientes hasta obtener una consistencia suave. Si la salsa queda muy espesa, puedes añadir más agua de cocción hasta obtener la textura deseada. Sazona con sal al gusto.
- Añadir aceite (opcional): Si prefieres una salsa más suave y brillante, añade una cucharada de aceite de oliva mientras licúas la mezcla.
Consejos y variaciones
- Más picante: Para una salsa verde casera más picante, puedes añadir más chiles serranos o incluso un par de chiles jalapeños.
- Menos picante: Si prefieres una salsa más suave, utiliza solo un chile serrano o sustituye los chiles serranos por chiles jalapeños, que son menos picantes.
- Asar los ingredientes: Para un sabor más profundo, puedes asar los tomatillos, los chiles, la cebolla y el ajo en una sartén seca antes de licuarlos. Esto le dará a tu salsa un toque ahumado.
- Con aguacate: Agrega un aguacate maduro a la licuadora para obtener una salsa verde cremosa y suave.
Cómo conservar la salsa verde
Para conservar tu salsa verde casera, guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador. Se mantendrá fresca durante unos 5 a 7 días. También puedes congelarla en porciones individuales para utilizarla cuando la necesites.
Usos de la salsa verde casera
Esta salsa verde casera es extremadamente versátil. Úsala como:
- Acompañamiento para tacos y quesadillas.
- Salsa para enchiladas verdes.
- Aderezo para ensaladas mexicanas.
- Dip para totopos.
Preparar tu propia salsa verde casera no solo es fácil, sino que también te garantiza un sabor auténtico y fresco que mejora cualquier platillo. Experimenta con las cantidades de los ingredientes hasta encontrar la combinación perfecta para tu gusto. ¡Disfruta de esta deliciosa salsa y lleva tus comidas al siguiente nivel!